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Como arrendar con inmobiliaria y no morir en el intento


Sábado 8 de septiembre 2018


Cuando los ciudadanos buscan apartamento para arrendar es común que surjan dos alternativas: hacerlo por inmobiliaria o contratar directamente. Un aspecto que es relevante si se tiene en cuenta que 34,5 % de la población vive en arriendo o subarriendo, según el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane), y que de cada 100 viviendas que se construyen 23 se destinan a ese negocio.


A veces un solo inmueble es ofrecido por varias empresas que compiten por el usuario. Más allá de que las 450 compañías registradas en el Valle de Aburrá,según la Lonja de Propiedad Raíz, participen como recaudador del canon de arrendamiento, lo cierto es que de ellas emanan deberes, aunque hay preguntas que se deben hacer a la luz de conocer el servicio, pues una vez se firma un contrato de arrendamiento no hay vuelta atrás.


Aspectos como ¿quién responde si hay un daño?, ¿cuánto tiempo se toman para mandar a hacer una revisión? ¿cuál es el tiempo de respuesta ante un inconveniente? ante ¿quién acudir si no dan trámite a los requerimientos del usuario? o ¿cómo terminar unilateralmente el contrato? son algunas preguntas que debería hacer a la compañía con la que va a firmar un contrato de arriendo.


Federico Estrada, gerente Lonja de Propiedad Raíz de Medellín y Antioquia, asegura que estas preguntas están entre las preocupaciones de los arrendatarios, pero ahí es donde son importantes las inmobiliarias. Son “un mediador entre el propietario y el inquilino, porque al final del día es usual que el que debe pagar por un arreglo es el propietario, aunque esto se decide después de un análisis sobre las causas”.


Hoy no hay una norma que indique en qué tiempo se debe dar solución a un problema en una vivienda, eso hace parte de la autorregulación de las empresas, pero Estrada aclaró que “el control y vigilancia de la actividad lo ejercen las secretarías de gobierno de cada municipio”.


Para Ignacio Esneider Jaramillo, presidente de la Liga de Consumidores y Usuarios de Servicios para Antioquia, hay dos pecados que cometen las inmobiliarias: la falta de solidaridad a la hora de la terminación de un contrato, de manera unilateral, por ejemplo por enfermedad, o que el canon supera, algunas veces, lo establecido por ley.


Sea como fuere Alfonso Álvarez López, director de Asociación de propietarios, arrendatarios y administradores de propiedad horizontal (Asurbe), señaló que es muy importante que la inmobiliaria, el propietario, el inquilino y la administración de la propiedad no se entiendan como “bandos, la visión debe ser de equipo para que todo funcione en el inmueble”.


Finalmente, es muy importante que el dueño del inmueble no se desentiende de lo que pasa allí ni con su inquilino.





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