Martes 25 de noviembre
Cuando arriendas un inmueble, no solo estás recibiendo un espacio para vivir: también estás asumiendo la responsabilidad de cuidarlo como si fuera tuyo. Mantener la vivienda en buen estado no solo te permite vivir más cómodo, sino que también evita dolores de cabeza, costos innecesarios y reclamos con el propietario.
Aquí te dejamos una guía sencilla con los cuidados básicos que todo inquilino debería tener en cuenta para mantener su hogar impecable.
🔧 1. Atento a los pequeños daños antes de que sean grandes problemas
Las filtraciones, grietas, humedades o enchufes flojos no aparecen de un día para otro.
Como inquilino es clave que:
Un daño pequeño atendido a tiempo evita reparaciones costosas y molestias mayores.
🧹 2. Mantén rutinas básicas de limpieza
La acumulación de polvo, grasa o humedad puede deteriorar paredes, pisos, muebles y electrodomésticos. Mantén:
Un hogar cuidado luce mejor y dura más.
🚿 3. Trata los espacios como si fueran propios
Aunque no seas el propietario, sí eres quien habita el espacio. Por eso:
Tu buen trato se verá reflejado al momento de la entrega.
💡 4. Ahorra energía y agua… tu bolsillo también lo agradece
Pequeñas acciones pueden marcar la diferencia:
Cuidar los servicios evita consumos altos y daños a futuro.
🧰 5. Realiza mantenimientos básicos
Como inquilino, son tu responsabilidad las pequeñas reparaciones del día a día, como:
Y si el daño es mayor, ¡no lo intentes solucionar sin autorización! Reporta primero a tu inmobiliaria para evitar riesgos.
📝 6. Reporta siempre a tiempo
La regla de oro:
👉 Todo lo que veas, repórtalo rápido.
Un mensaje a tu inmobiliaria puede evitar que un daño pequeño se convierta en un problema grande.
Además, reportar a tiempo deja evidencia de tu responsabilidad como inquilino.






